
20
Ago
¿Por qué al vino de mesa se le dice tinto y no rojo?
Cuando se obtiene el vino en las primeras etapas –justo después de la fermentación–, el color es amoratado/azuloso, casi negro, y los antiguos lo comparaban con la tinta de escritura.
A medida que transcurre el tiempo, la cantidad de azules baja, sube un poco el rojo y, sobre todo, aumenta considerablemente el amarillo, dando una tonalidad mucho más roja-rubí, que después vira a rojo-naranja y luego a rojo-ladrillo.
Interesante, ¿no? Ahora ya puedes impresionar a tus amigos con tu alto conocimiento en vinos.
No Comments